EL CHICO DE CABELLOS PLATEADOS

Érase una vez un chico de cabellos plateados. Tenía una larga melena plateada, algo extraño para un chico, que siempre lucía de manera impecable. Su cuerpo era atlético y delgado, tenía la suerte de tener una buena constitución. Su rostro era de contornos suaves y delicados, con rasgos femeninos, de una belleza desconcertante. Las chicas que lo veían tenían la impresión de ver a un ángel, a una especie de ser andrógino con una belleza más allá de este mundo.Y es que en él lo masculino y lo femenino se halllaban en perfecta armonía, de una manera inaudita, que se reflejaba en su apariencia física. Sus ojos eran cálidos y dulces, con una mirada poética y serena. Vestía de forma clásica, con ropa muy elegante pero sencilla.

Vivía en una casa blanca, donde abundaba la decoración sencilla y de madera. A él le gustaba tener siempre una buena iluminación y usar tonos naturales. Vivía solo porque siempre se sintió completo, se bastaba consigo mismo. En su casa destacaba un precioso y cuidado jardín. Su tamaño era como el de cualquier jardín que pueda tener una casa, pero él adoraba la botánica y tenía una gran variedad de flores. El jardín estaba diseñado de forma exquisita. Le gustaban especialmente los rosales, tenía de varios colores, pero sus favoritas eran las rosas blancas. La verdad es que hacía mucha vida en su jardín, porque también era su remanso de paz y su fuente de inspiración. Tenía siempre un lienzo con su trípode preparado para pintar. Le gustaba pintar al óleo o bien con carboncillos y utilizando los dedos para difuminar. También adoraba la poesía. El jardín tenía en el centro una mesa y una silla donde él se sentaba cada tarde a tomar el té relajadamente. Solía sentarse y meditar, o bien se inspiraba para escribir o pintar. También visitaba cada día cada una de sus flores, observando que sus cuidados fueran impecables. No es que fuera meticuloso, simplemente su grado de atención y delicadeza hacia las cosas era algo que se escapa a la comprensión. Cuando pintaba se abstraía de tal manera que su mirada estaba totalmente concentrada en lo que hacía, adoptaba una mirada intelectual, recreándose en el detalle.

Era médico de profesión, con amplios conocimientos de filosofía. Su facilidad para las lenguas también hizo que hablara algunas lenguas. Pero para él, todo aquello era simplemente conocimiento, que utilizaba en el ámbito práctico cuando la situación así lo requería. Él prefería lo intangible: como el arte y la filosofía. Como artista tenía mucha paciencia. Prefería tener pocas obras pero dedicarles todo el tiempo necesario, con calma. Así era como disfrutaba.

Cuando salía a la calle siempre había alguna chica que se lo quedaba mirando. Su presencia solía abrumar a las chicas, que cuchicheaban y lo miraban tímidamente, como algo que no podía ser real. A veces él ni se daba cuenta, pero si se percataba sonreía dulcemente. Eso era algo que resultaba cómico para él. Sin embargo, era muy observador en general. Mientras caminaba observaba las cosas y se hacía una idea rápida de cualquier situación.

Un día como tantos, salío a caminar, ya que era una tarde soleada que invitaba a dar un paseo. En su paseo se cruzó con una persona totalmente distinta a las que hasta el momento se había encontrado. Era una chica, una estudiante universitaria como tantas, pero que consiguió captar toda su atención. La energía tan sublime que emanaba aquella chica era algo que no había visto antes. La observó y se hizo una idea: parecía la típica chica con autoestima baja, a la que le gustaba pasar desapercibida, tímida,...pero esa era la idea que ella tenía de sí misma. El vió algo muy distinto: vió una chica de una belleza delicada, que podía parecer frágil, pero eso era debido a su extrema pureza. Encontró en ella una feminidad exquisita, lo que justamente su alma de poeta hubiera definido como feminidad. Sus gestos eran tan armoniosos, y ella caminaba ajena a toda esa belleza que a él lo había cautivado.
La chica pasó y él continuó caminando pensando cómo era posible que ella no se diera cuenta de lo que él había visto en ella. Él llegó a casa, se sentó en el jardín a tomar el té y se quedó pensando en eso. Los días pasaron y otra tarde volvió a salir. La casualidad quiso que él volviera a encontrarse a aquella chica: caminaba como la otra vez, con prisas, como pensando en cosas que para él carecían de toda importancia. La chica se le acercó para pedirle la hora. Fue de las pocas chicas que no se impresionó por su presencia. Se dirigió a él como lo hubiera hecho con cualquier otra persona. Eso a él le gustó especialmente. La invitó a tomar el té en su casa y ella aceptó con normalidad. Ella sonrió y le resultó cautivadora: al sonreir se le iluminaba la cara, era tan dulce...

Se sentaron a tomar el te y los bellos ojos cálidos del chico se fijaban en los gestos tan femeninos de ella. Que belleza. Hablaron un buen rato de temas interesantes. Ella se fijó en su bello jardín y en el lienzo. Se acercó a ver lo que estaba pintando y le dijo que pintaba muy bien. Él le enseñó el jardín, le explicó que esas eran sus aficiones y estuvieron hablando de ello un rato. La chica dijo que lo había pasado muy bien, pero que era hora de irse a casa. Él la invitó de nuevo otro día. Nunca antes otra chica había pisado su casa, pero ella sin duda era la excepción. Los gestos y el rostro de aquella chica continuaban en su mente, y en los días siguientes fue la inspiración para su nuevo dibujo. La tarde que ella vino a su casa coincidió que estaba pintando. Ella preguntó quien era la persona del dibujo. Eres tú, dijo él. Ella sonrió un poco sonrojada. A él le encantaba eso. Continuaba mirándola: como podía no ver ella lo que él veía en ella. Se puso en pie y se acercó a ella, ella lo miró preguntándose que era lo que iba a decir. Pero él esta vez no diría nada: le dió un cálido beso en los labios. Benditos labios... aquel beso los fusionó por completo.

AMOR, POESÍA Y ROMANTICISMO

Sigo romántica y hoy además con imaginación, lo cual significa... que me inspiro! Y sigo con Babyface. Bien, juntando todo eso se me ha ocurrido recrear una escena romántica, a lo mejor le doy una idea a alguien, ojalá que alguna pareja de enamorados lea esto y les sirva.

Voy a recrearos una escena romántica con la que declararse a alguien. Yo creo que las típicas cenas románticas, las rosas, la velas,... están bien, pero son ya muy típicas. Para mí lo verdaderamente romántico es lo que uno pueda aportar, un detalle creado por uno mismo, algo original o atrevido, y no hay porqué gastarse mucho dinero. Voy con mi idea. No es nada nuevo, pero es sólo para atrevidos.

Llevar a vuestra pareja a la discoteca de siempre, como si fuera un fin de semana más. Si es un local grande, mejor, será más espectacular. Previamente, vosotros habreis hablado con el Dj del local para que os ponga esta canción romántica en un determinado momento. Vosotros os colocais estratégicamente en el centro del local porque llegado el momento todas las luces se apagaran y sólo os iluminaran a vosotros dos... Pasais la noche como siempre, mezclados con la gente hasta que... ES LA HORA: SE APAGAN LAS LUCES Y EL DJ PARECE ESTAR DICIENDO ALGO...

- "Esta canción va dedicada a... de parte de..."

Entonces el foco central os ilumina sólo a vosotros dos. Tomas a tu pareja de la mano, la acercas a ti y empiezas un baile lento mientras le susurras al oído la canción.





God must love you i said to myself
Cause your more beautiful than
anybody else
God must adore you, its easy to tell
Must be wonderful to wake up to yourself
From the moment i first saw you
Had a vibe thats fit to kill
It was then you know that i knew love was real

[Chorus]
On the day i met you, you were so so chill
On the day i fell in love with you my heart stood still
And i never saw this happening to me
Its like something coming over me
I never thought that i could be

God must love you he's proud of himself
When he made you girl he broke the mold for real
Theres just something bout you that you cant even tell
Its the way you flow you dont even know that you got that wip appeal
From the moment i first saw you, had your vibe on "set to kill"
It was then you know that i knew love was real

[Chorus(x2)]
Never thought love could be real
Suddenly i see your face and i get chills
And everything i never thought i could feel is for real
Love is real

[Chorus(x2)]

AMORES DEL PASADO

El amor y el pasado no es una fácil combinación, yo creo que quizás tampoco la adecuada, en todo caso es la que me ha tocado vivir hasta ahora. He leído que se supone que en la vida anterior no viví el plano sentimental, fuí quizás demasiado mental y en esta vida aparecen esas personas del pasado en mi vida afectiva. Tengo ya varias nociones de mi vida pasada, y supongo que las circunstancias no me permitieron vivir mi vida afectiva plenamente, quizás hasta tenía poca libertad en ese sentido, quizás tenía cosas y personas a las que "debía" atender, tenía esa responsabilidad. Cuando juntas las dos cosas, el pasado con el Amor, la carga emocional que de ahí puede surgir se multiplica, sumada a una extraña carga de culpa que remanece en mi subconsciente con esas personas. En resumidas cuentas, es doloroso y frustrante. Es doloroso y frustrante porque esas personas ahora ya no son las mismas, son de otra manera, con otra personalidad, otra manera de sentir. Quisiera arreglar lo que no hice entonces, quisiera volver atrás y cambiar las cosas. Ahora las cosas son diferentes y arreglar aquello supone romperme a mí el corazón una y otra vez. Es curioso que esas personas que se me aparecen son precísamente mentales, poco dadas a sentir sus emociones. ¿Cómo se pueden arreglar las cosas así? No lo sé, me siento cansada. Es una situación que tampoco me parece justa, preferiría arreglar eso desde una amistad, así no me dolería tanto.

¿Qué puedo decir? A todas esas personas que no les pude dedicar mi Amor sólo decirles que lo siento, les pido perdón. Me siento culpable por ello. No dediqué mis emociones a nadie, pero tampoco me las dediqué a mi misma, creo que era como si me las hubiera extirpado.

Lo siento

PARA MI ETERNO AMANTE

Después de despertar del Sueño de esta vida,
después de que La Chica Durmiente se despertara,
un día vi tu preciosa faz, radiante, que me deslumbró.
Desde entonces no ha habido otra igual.
La busqué en mil caras diferentes, pero no la hallé.
Sin embargo, podía cerrar los ojos y ver perfectamente tus preciosos ojos,
tu sonrisa, tu cabello, tus labios...tan bien hechos...era pura Poesía.
Podía cerrar los ojos y alcanzarte con mis brazos y estar entre los tuyos,
me sentía tan bien entre los tuyos que no hubiese preferido otro lugar.
Me abrumas...me abrumas tanto que no me atrevo, me quedaría ahí quieta observándote.
Eres demasiado.
Y aunque no me atrevo, mi Corazón siente que es a tí a quien ama,
aunque después temblara si te me acercaras.
Los sentimientos simplemente fluyen...salen del Corazón y irradian hacia fuera,
vuelan hacia el infinito porque son libres y sinceros,
la timidez no los frena,
el Amor es mucho más grande.
Cuantos versos querría decirte,
mas no serían suficiente.
Te los dedico TODOS.
Una sola palabra los resume: Te Amo por Siempre.

PORQUE NO TODOS SOMOS IGUALES...

No, no todos somos iguales.
Hay personas que ni se imaginan el Amor que les tenemos, más allá de sus comportamientos. Algunos confunden el Amor con la Pasión, el Sexo,…y demás, pero el Amor está mucho más allá de todo eso.
Hace poco terminé una relación con una persona y ni se imagina lo mal que lo he llegado a pasar. Me retorcía de dolor. Era el apego que se le tiene a alguien con quien te sientes ligado y te resulta familiar, algo que llevas muy dentro. Durante esos días esa persona no se puso en contacto conmigo, no se interesó por cómo estaba, ni siquiera saludó como lo haría un amigo. Nada. Eso te deja desecho. Hubiera esperado al menos algún tipo de contacto, aunque sólo fuera un simple “hola”, pero por lo visto no todos somos iguales.
De todas formas, no era una relación sincera como tendría que ser. Si era sincera por mi parte, creo que la sinceridad es algo básico, pero no por la suya. Siempre había notado incoherencias. Pero decidí confiar, decidí dar una oportunidad, pero la confianza no es ciega.
Quizás me apegaba demasiado al pasado, a esa vida en que yo era el guerrero y ella mi enamorada, a ese recuerdo que se hallaba dentro de mí, a ese sentimiento. Pero ahora esa persona era diferente, seguramente ni siquiera sabrá que no es la primera vez que nos vemos.
He visto hace unos días que esa persona estaba mal, o eso parecía, y le he ofrecido mi apoyo. No puedo evitar preocuparme. Quiero saber que está bien y, sino, quiero encargarme de que esté bien. Mi instinto protector se ha conservado durante estas vidas, es algo que llevo muy dentro. Aunque esa persona seguramente ni lo sabe. Salvaría a esa persona de todas las catástrofes que hubiera en el Mundo. Veo que en esta vida esa persona está muy confundida, hay personas que han llegado a influenciarle mucho. Personas que pueden evocar algo paternal, que pueden evocar admiración, pero cuyo discurso es manipulador. Espero que no tome ese ejemplo, aunque lo que he visto no me resulta nada alentador. Me consuela saber que su sentido moral todavía no se ha perdido, por eso dejó nuestra relación. Le remordía su consciencia. Necesita aclarar toda esa confusión que tiene en su interior, ya que su confusión abarca muchos niveles. Necesita conectar con su interior y abrir los ojos.
Pero ahora me he desapegado de ese pasado. Conservo mi instinto protector, aunque de diferente manera. Me liberé. Me visualicé como aquél guerrero de entonces alejándome solo, siguiendo un Camino diferente, entregándome por completo a mi Misión. Ya no pondría en peligro a mi amada, mi amada podría vivir una vida feliz, tranquila, a su manera. Y yo podría dedicarme por completo a mi Misión, a la Acción, ahora sin preocuparme por los peligros a enfrentar, ya que eso es lo que yo sabía hacer.
Aun así, aquella vida es un bonito recuerdo. Entonces sí fue una bella historia de Amor. Aunque ahora las cosas sean diferentes, siempre podemos llevar ese recuerdo en nuestros corazones.